El 2F: la marea roja se lleva el castillo de Arena
2 de febrero: son las 5:00 de la mañana, estoy en la entrada vehicular del Instituto
Nacional General Francisco Menéndez, conocido por todos como Inframen. Jóvenes
activistas del FMLN han llegado a las puertas con todo y batucada, en eso dos
pick up polarizados, se baja la diputada Norma Guevara, para dar las últimas
indicaciones para la defensa del voto.
Espero ansiosamente que inicie la
entrada de los miembros de las Juntas Receptoras de Votos (JRV), los vigilantes
de los partidos en contienda, supervisores
de centro, observadores nacionales e internacionales, medios de comunicación
etc.
Finalmente me decido entrar alrededor de las 5:20 am, me dirijo por los
pasillos siguiendo a los miembros de las JRV que van hacia el Centro de Cómputo
donde la Junta Electoral
Municipal (JEM) está entregando los paquetes electorales. Tres jefes de centro
anduvieron de arriba para abajo para acomodar su gente.
El griterío
no se hace esperar: eran casi las 5:45 am y hasta esa hora
los de la JEM piden que se haga una fila mientras ellos
llaman por su número a cada JRV: primer error, las JRV no están completas,
usualmente faltaba el miembro de Unidad. La entrega de paquetes siguió hasta
las 6:30 am. Luego la instalación urgente de la JRV 64 que recibiría los votos
de los agentes de la
Policía Nacional Civil (PNC), fui testigo de un hecho
histórico: por primera vez desde su fundación se permitiría a los PNC votar en
el lugar donde estuviesen prestando sus servicios de seguridad. Fue hasta las
siete y treinta que ya habían emitido el sufragio y hasta entonces se
reincorporaron a sus puestos asignados.
Con más de media hora de retraso, la apertura del centro de votación
estaba programada para las 7:00 am, imposible fue ignorar la discusión de la JRV 47, había inconformidad
entre los miembros de la mesa (todas mujeres) porque la “presidenta” tenía su DUI
laminado, la secretaria y la vocal se oponían a que se integrara a la JRV , alegando que se violaba
el Art. 32 del Código Electoral, las dos apasionadas señoras se dijeron de todo
y sus miradas eran de muy pocas amigas, al final, la llegada de los delegados
de la JEM le dio
la razón a la presidenta y avaló que asumiera, porque en realidad el documento
no estaba “alterado” únicamente se le retiró el plástico y todo siguió en
marcha. Me extrañó mucho que la delegada JEM del FMLN no respaldara a su
integrante de mesa tal como si lo hizo el delegado JEM de Arena. El Tribunal
Supremo Electoral debe aclarar con más detalle eso de los DUIs alterados, es muy
vaga la definición existente.
Resuelto el conflicto de
Por un momento pensé que el ambiente triunfalista de Arena en el Roque Dalton era común en todas las demás JRV a nivel nacional, pero no fue así, la marea roja arrastró en 13 departamentos, el castillo de Arena
Publicado en Brújula Electoral n° 21 del 12 de febrero http://www.uca.edu.sv/upload_w/16/archivo/1392218140-52fb901caa7a1.pdf
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