La democracia que los empresarios quieren…
Moisés Gómez (*)
SAN SALVADOR-El ENADE (Encuentro Nacional de la Empresa Privada) de este año arroja recomendaciones o propuestas para mejorar sustancialmente el sistema político salvadoreño, un sistema que desde su propio punto de vista (empresarial y lucrativo) necesita urgentemente implementar estas medidas. El ENADE propone una especie de “salvavidas” para el sistema político antes que se ahogue o colapse.
Los empresarios y sus aliados tienen propuestas para:
*Sistema electoral debe implementar de inmediato listas cerradas y desbloqueadas y a futuro listas abiertas de candidatos.
*Consejos Plurales. De inmediato representatividad proporcional.
*Ley de transparencia en financiamiento de partidos políticos y candidatos no partidarios.
*TSE: separar las funciones administrativas de las de justicia electoral.
*Crear una Contraloría general encargada de fiscalizar la actividad económica y financiera del Estado y la actual Corte de Cuentas proponen que se convierta en máximo tribunal que imparta justicia y dirija los juicios de cuentas.
*Estado de Derecho y justicia: tres cosas que deben arreglarse. Uno: reformar el art. 174 de la Carta Magna para fortalecer las funciones de la Sala de lo Constitucional por medio de elevar a rango constitucional la regla de decisión de mayoría calificada para procesos de inconstitucionalidad; amparos y habeas corpus basta con que la decisión sea por mayoría simple. Complementando lo anterior indican que se eleve a rango constitucional el que los miembros de la Sala de lo Constitucional no puedan ser trasladados para otras salas durante el periodo para el cual fueron elegidos. Dos: proponen que se reforme art. 131 de la Constitución para que una misma legislatura solo pueda elegir una vez a funcionarios del segundo nivel como es el caso de los magistrados de la CSJ. Tres: reformar los requisitos para ser nombrado candidato a Magistrado, prevaleciendo los principios de máxima honorabilidad y máxima moralidad, entre otros.
*Fiscalía: proponen 4 medidas que incluyen extensión hasta seis años con opción de reelección para el fiscal; competencia profesional y calidad moral del candidato a ser fiscal; asignación del 2% o más del presupuesto general para la FGR; reformar el Código Procesal Penal para que una acción pública pueda ser transformada en acción privada a pedido de la víctima o su apoderado especial.
Propongo al lector que haga un ejercicio mental sencillo: imaginemos que viene el gobierno en acuerdo con la Asamblea Legislativa y pensemos que al mismo tiempo ocurre una conjunción inusual entre el interés público y el interés privado que permite que toda esta serie de propuestas y medidas se hicieran realidad; estaríamos en el mejor de los mundos posibles o al menos en la mejor democracia salvadoreña de todos los tiempos. Tendríamos el sueño de la democracia liberal que consiste en que las distintas instituciones operan con “independencia”.
Volvamos a la realidad: ¿y la economía? ¿Qué pasaría en lo económico en ese mundo democrático resultado de tanta independencia entre los poderes? ¿Cómo se mejoró la vida de las personas en cuanto a mejores salarios? ¿La actividad económica privada aceptó mayores impuestos para financiar la burocracia que se genera de duplicar el TSE, Corte de Cuentas, Fiscalía, etc.? ¿Sería posible que cada padre/madre de familia tuviera los recursos económicos para candidatearse por algún huesito ya sea en lo municipal o legislativo? Puedo intuir que la respuesta es un rotundo NO.
Por ejemplo para transitar hacia un sistema electoral que permita cada vez mayor participación de candidatos “independientes” “no partidarios” y en general que los consejos municipales sean plurales; la mejor solución es la EDUCACIÓN de la población, siendo este un país donde las mayorías pobres se forman en el sistema de educación pública; si de verdad quisiéramos la democracia asignáramos más de lo que actualmente se destina que no pasa del 3% del PIB. Lo mejor sería dedicar más fondos a la educación y estos se obtienen a través de impuestos que los empresarios se niegan a aceptar. La verdad es que apostar a la educación de la población sería lo más adecuado para transformar realmente al país. Por ejemplo el tema de la transparencia y administración de dineros públicos o privados no se arregla con legislar -ayuda pero no es suficiente- el valor de la honestidad y la honradez se cultiva en la escuela desde que el niño (a) entra al sistema escolar. La misma situación con el valor de la Justicia no es con una reforma constitucional o con las reformas a leyes secundarias que se alcanza. Es la educación la que debe ser justa no excluyente como ocurre ahora mismo. El sistema enseña que la justicia es competir, competir y ganar a toda costa. ¿De dónde va a salir ese Sócrates Magistrado ideal que quieren los empresarios? ¿De dónde va salir ese administrador, ese auditor o ese economista que respeta la ley y que al mismo tiempo la fomenta como valor? Tendría que salir del sistema educativo pero allí lo que hay es la cultura del vivo como dice el sociólogo Luis González…
Si en realidad los empresarios quisieran aportar de verdad al país deben contribuir más desde su propia especificidad que es cediendo generosamente parte de las utilidades que generan sus negocios. Todos deseamos una mejor democracia, también es cierto que todos debemos hacer el aporte para ello: los que tienen mucho dando mucho y los que tienen poco dado poco. La democracia no flota al margen de los aspectos económicos que determinan relaciones sociales de desigualdad y de exclusión. El sistema político en parte es reflejo de esa desigualdad y exclusión y más bien hay intereses oscuros que desean que sea así.
Me parece una idea de democracia muy formalista la que plantea el documento; todo es reformar, crear nuevas leyes, reescribir algunas ya existentes etc., etc., todo es papel y tinta; reduce todo a la mera falta de voluntad política y que si ella existiera ya de tajo y así de simple el país diera un salto cualitativo…no lo creo así.
Señores empresarios la democracia es una praxis de cada día, es una habitud y esta se enseña, se transmite en primer lugar con el ejemplo. Con todo y que se llevaran a cabo todas sus propuestas del ENADE este país no sería más democrático. A pesar que su visión económica del país es una economía social de mercado en realidad quisieron decir que esos cambios son para una SOCIEDAD DE MERCADO.
19 febrero 2012.
SAN SALVADOR-El ENADE (Encuentro Nacional de la Empresa Privada) de este año arroja recomendaciones o propuestas para mejorar sustancialmente el sistema político salvadoreño, un sistema que desde su propio punto de vista (empresarial y lucrativo) necesita urgentemente implementar estas medidas. El ENADE propone una especie de “salvavidas” para el sistema político antes que se ahogue o colapse.
Los empresarios y sus aliados tienen propuestas para:
*Sistema electoral debe implementar de inmediato listas cerradas y desbloqueadas y a futuro listas abiertas de candidatos.
*Consejos Plurales. De inmediato representatividad proporcional.
*Ley de transparencia en financiamiento de partidos políticos y candidatos no partidarios.
*TSE: separar las funciones administrativas de las de justicia electoral.
*Crear una Contraloría general encargada de fiscalizar la actividad económica y financiera del Estado y la actual Corte de Cuentas proponen que se convierta en máximo tribunal que imparta justicia y dirija los juicios de cuentas.
*Estado de Derecho y justicia: tres cosas que deben arreglarse. Uno: reformar el art. 174 de la Carta Magna para fortalecer las funciones de la Sala de lo Constitucional por medio de elevar a rango constitucional la regla de decisión de mayoría calificada para procesos de inconstitucionalidad; amparos y habeas corpus basta con que la decisión sea por mayoría simple. Complementando lo anterior indican que se eleve a rango constitucional el que los miembros de la Sala de lo Constitucional no puedan ser trasladados para otras salas durante el periodo para el cual fueron elegidos. Dos: proponen que se reforme art. 131 de la Constitución para que una misma legislatura solo pueda elegir una vez a funcionarios del segundo nivel como es el caso de los magistrados de la CSJ. Tres: reformar los requisitos para ser nombrado candidato a Magistrado, prevaleciendo los principios de máxima honorabilidad y máxima moralidad, entre otros.
*Fiscalía: proponen 4 medidas que incluyen extensión hasta seis años con opción de reelección para el fiscal; competencia profesional y calidad moral del candidato a ser fiscal; asignación del 2% o más del presupuesto general para la FGR; reformar el Código Procesal Penal para que una acción pública pueda ser transformada en acción privada a pedido de la víctima o su apoderado especial.
Propongo al lector que haga un ejercicio mental sencillo: imaginemos que viene el gobierno en acuerdo con la Asamblea Legislativa y pensemos que al mismo tiempo ocurre una conjunción inusual entre el interés público y el interés privado que permite que toda esta serie de propuestas y medidas se hicieran realidad; estaríamos en el mejor de los mundos posibles o al menos en la mejor democracia salvadoreña de todos los tiempos. Tendríamos el sueño de la democracia liberal que consiste en que las distintas instituciones operan con “independencia”.
Volvamos a la realidad: ¿y la economía? ¿Qué pasaría en lo económico en ese mundo democrático resultado de tanta independencia entre los poderes? ¿Cómo se mejoró la vida de las personas en cuanto a mejores salarios? ¿La actividad económica privada aceptó mayores impuestos para financiar la burocracia que se genera de duplicar el TSE, Corte de Cuentas, Fiscalía, etc.? ¿Sería posible que cada padre/madre de familia tuviera los recursos económicos para candidatearse por algún huesito ya sea en lo municipal o legislativo? Puedo intuir que la respuesta es un rotundo NO.
Por ejemplo para transitar hacia un sistema electoral que permita cada vez mayor participación de candidatos “independientes” “no partidarios” y en general que los consejos municipales sean plurales; la mejor solución es la EDUCACIÓN de la población, siendo este un país donde las mayorías pobres se forman en el sistema de educación pública; si de verdad quisiéramos la democracia asignáramos más de lo que actualmente se destina que no pasa del 3% del PIB. Lo mejor sería dedicar más fondos a la educación y estos se obtienen a través de impuestos que los empresarios se niegan a aceptar. La verdad es que apostar a la educación de la población sería lo más adecuado para transformar realmente al país. Por ejemplo el tema de la transparencia y administración de dineros públicos o privados no se arregla con legislar -ayuda pero no es suficiente- el valor de la honestidad y la honradez se cultiva en la escuela desde que el niño (a) entra al sistema escolar. La misma situación con el valor de la Justicia no es con una reforma constitucional o con las reformas a leyes secundarias que se alcanza. Es la educación la que debe ser justa no excluyente como ocurre ahora mismo. El sistema enseña que la justicia es competir, competir y ganar a toda costa. ¿De dónde va a salir ese Sócrates Magistrado ideal que quieren los empresarios? ¿De dónde va salir ese administrador, ese auditor o ese economista que respeta la ley y que al mismo tiempo la fomenta como valor? Tendría que salir del sistema educativo pero allí lo que hay es la cultura del vivo como dice el sociólogo Luis González…
Si en realidad los empresarios quisieran aportar de verdad al país deben contribuir más desde su propia especificidad que es cediendo generosamente parte de las utilidades que generan sus negocios. Todos deseamos una mejor democracia, también es cierto que todos debemos hacer el aporte para ello: los que tienen mucho dando mucho y los que tienen poco dado poco. La democracia no flota al margen de los aspectos económicos que determinan relaciones sociales de desigualdad y de exclusión. El sistema político en parte es reflejo de esa desigualdad y exclusión y más bien hay intereses oscuros que desean que sea así.
Me parece una idea de democracia muy formalista la que plantea el documento; todo es reformar, crear nuevas leyes, reescribir algunas ya existentes etc., etc., todo es papel y tinta; reduce todo a la mera falta de voluntad política y que si ella existiera ya de tajo y así de simple el país diera un salto cualitativo…no lo creo así.
Señores empresarios la democracia es una praxis de cada día, es una habitud y esta se enseña, se transmite en primer lugar con el ejemplo. Con todo y que se llevaran a cabo todas sus propuestas del ENADE este país no sería más democrático. A pesar que su visión económica del país es una economía social de mercado en realidad quisieron decir que esos cambios son para una SOCIEDAD DE MERCADO.
19 febrero 2012.
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